Entrevista publicada en Donbalon.com (30/10/2015)
Protagonista en el Mundial del 74 donde la Holanda de Johan Cruyff sorprendió al mundo con un fútbol total, destacado en el fútbol sudamericano donde jugó con Racing Club y River Plate en una primera etapa y posteriormente en Argentinos Juniors donde daba sus primeros pasos Diego Armando Maradona y finalmente en Tigre. Entre sus dos etapas en el fútbol argentino pasó por España para dejar un recuerdo imborrable en una de las mejores épocas de la UD Las Palmas y revivió a un Real Madrid que pasaba por una crisis y que con él al mando ganó dos ligas en dos años. Compartió vestuario entre otros con Del Bosque, Juanito o Camacho en esa etapa de su vida y cuando colgó las botas se pasó al periodismo para devolverle al fútbol un poco de todo lo que este le ofreció. Lo consiguió con creces. Por su programa “Simplemente Fútbol” han pasado todos los grandes y es una de las voces más autorizadas para hablar de este deporte. Todo eso y mucho es Quique Wolff, un caballero del fútbol, jugador a sus 66 años porque a los médicos se les sigue llamando médico cuando ya no practican y el reclama lo mismo para los futbolistas, apasionado de todo lo que hace, él mismo lo reconoce: “No hay nada comparable a entrar a una cancha a «jugar a la pelota»”.
Le he leído en muchas entrevistas hablando de sueños, muchos de ellos cumplidos y muchos por venir. ¿Se sueña de futbolista vestido de corto con la albiceleste o con alguno de los equipos que estuvo?
Yo soy un soñador y apuesto por los que persiguen sueños, pero eso que me preguntas más que un sueño es un recuerdo y eso ya está guardado en mi corazón y forma parte de la parte de mi vida más emocionante, ya que jugar al fútbol como profesional fue en su momento mi sueño, que gracias a Dios, se cumplió.
¿Cómo surgió la opción de jugar en la UD Las Palmas?
Lo de ir a jugar a la Unión Deportiva Las Palmas fue un riesgo acompañado de un sueño. Fue después del Mundial de Alemania y muchos pensaron que me había vuelto un poco loco, ya que dejaba un equipo importante de Argentina como River Plate, donde era el capitán, dejaba la Selección Argentina, donde también era el capitán, por un equipo que peleaba por no descender en España y además, no había diferencias económicas que lo justificaran. Pero lo primero que me entusiasmó era que no iba a jugar de lateral derecho, sino que iba a jugar en la mitad de la cancha y segundo, que iba a pelear por otro sueño: tratar de jugar en el Barcelona o el Real Madrid.
Para los que no vieron jugar ese equipo. ¿Qué tenía Las Palmas para ser la segunda mejor plantilla en cuanto a rendimiento de la historia del club, después de la que consiguió el subcampeonato en la 68-69 y el tercer puesto la temporada anterior?
El equipo se fue formando lentamente. Ya estaba Daniel Carnevali, llegué yo, al año siguiente llegó Morete y finalmente al otro año, llegó Miguel Ángel Brindisi. En el segundo año pasé a jugar de líbero, teníamos un gran jugador como Germán y muchos canarios de buen pie y con ganas de crecer. Así, poco a poco, con la ayuda de un entrenador como Heriberto Herrera, que llegó en el segundo año, y que nos dio seguridad y capacidad a casi todos, así se formó ese equipo que acabó cuarto en el campeonato de Liga, que llegó a una final de la Copa del Rey y que lo llevó a jugar la Copa UEFA.
Cuatro años en Las Palmas, la baja de Tonono le hizo pasar de jugar en el medio del campo a libero, donde posiblemente desplegó su mejor versión como futbolista. ¿Por qué desapareció esa demarcación en el fútbol?
No se juega con líbero porque se decidió por no hacer jugar al otro central un partido pulso a pulso con el delantero centro y porque en el fútbol actual el delantero centro ya no es el que se paraba solo en el área a pelear mano a mano con su marcador, la dinámica del juego ha hecho que se vuelva a la línea de cuatro, pero eso no habría cambiado para nada mi forma de jugar en ese puesto, que me pareció de los mejores en los que tuve que actuar.
«Radio Televisión Española me dio la medalla de oro como el mejor jugador de la Liga»
¿Jugó en Las Palmas su mejor fútbol?
Me adapté pronto al club, me sentí muy protegido por todos, aceptado por la gente y fueron tres años muy fuertes para mí. Al final del primer año nos salvamos del descenso jugando el último partido de liga en el Insular contra el Celta y el que perdía bajaba, ganamos y ese año Radio Televisión Española me dio la medalla de oro como el mejor jugador de la Liga y jugué de volante. Está claro que mi pase al fondo me dio libertad para jugar y me sentí muy cómodo y debí haberlo hecho bien, porque al segundo año el Barcelona me quiso comprar y Las Palmas no me vendió. Al tercer año vino el Real Madrid, hice fuerza y finalmente fui a la Casa Blanca.
Fue a un Real Madrid que venía de quedar por detrás de Las Palmas en la clasificación y en la primera jornada vio como se marchaba su técnico Miljan Miljanic. ¿Cuál era el estado del equipo a su llegada al conjunto blanco?
Llegar al Real Madrid fue algo maravilloso, llegamos juntos con Juanito y el alemán Stielike y si bien no se empezó bien, el equipo con Del Bosque, Pirri, Camacho, Santillana, Jensen, Sol, etc. estaba preparado para grandes cosas y terminamos ganando la primera liga por siete puntos de ventaja al Barcelona, lo que demostró que estábamos en muy buen nivel.
Pese a ese inicio, el Real Madrid consiguió acabar con su sequía y con usted como imprescindible, jugó todos los partidos de Liga durante sus dos temporadas en el equipo blanco, se consiguieron dos ligas. ¿Personalmente cómo fueron sus temporadas en el club blanco?
Me sentí muy cómodo, feliz de ponerme una camiseta como la del Real Madrid, haber jugado todos los partidos en los dos años en que estuve mostraban una gran confianza en mí por parte del técnico Luis Molowny y cuando uno juega al lado de grandes jugadores tiene muchas más posibilidades de hacerlo bien. Fue una etapa muy feliz.
Se dice que ahora los futbolistas son grandes atletas, sin embargo, cuando usted jugaba se podían ver pretemporadas o entrenamientos en la montaña, entrenamientos de atletismo sin necesidad de balón. ¿Es el gimnasio el entrenamiento fuera del terreno de juego de ahora?
No creo en las diferencias físicas, soy un defensor de los buenos jugadores y esos jugaban bien antes y lo hubieran hecho ahora. Lo mismo para los grandes jugadores de ahora que no habrían tenido dificultades de jugar antes. Es verdad que los entrenamientos eran diferentes y no creo que la solución para tener grandes jugadores sea la montaña o el gimnasio, los grandes jugadores se hacen en la cancha jugando y demostrando su capacidad futbolística. Lo demás hace a atletas y no a jugadores de fútbol.
«Cuando ahora veo el partido ante Holanda del Mundial 74, los veo superiores pero no tanto como me pareció el día del partido»
¿Cómo vivió en persona el impacto de la Holanda del 74 y el cambio que introdujo en el futbol de la época? (La Argentina de Wolff cayó eliminada en el Mundial tras un 4-0 de Holanda)
En su momento lo sufrí, perder de esa manera me golpeó, pero Holanda del 74 fue una revolución tan fuerte que todos nos acordamos de ellos cuando nombramos ese Mundial, y eso que no fueron campeones ya que perdieron la final contra Alemania, a quien nosotros le habíamos ganado en Múnich un año antes. Fue una revolución porque todos podían jugar en cualquier lugar de la cancha y porque hacían relevos, cambios de lugar y jugaban al fútbol a un gran nivel. Para los que no recuerdan sólo les digo que en la delantera jugaban Repp, Neeskens, Cruyff, Van Haneggen y Resenbrick.
Cuando ahora veo el partido, los veo superiores pero no tanto como me pareció el día del partido.
Ha jugado con Maradona en Argentino Juniors y contra jugadores como Pelé o Johan Cruyff. Tres de los jugadores más grandes de la historia del fútbol. ¿Quién le sorprendió más?
Disfruté de los tres. El primero al que me enfrenté fue a Pelé que era algo impresionante, recuerdo que alguna vez fuimos con Racing a jugar contra el Santos y en el vestuario nos enteramos que Pelè no jugaba y era una fiesta, si jugaba todos estábamos preocupados con su presencia. Fue un monstruo del fútbol y todo lo hacía bien.
Después me tocó Johan Cruyff, inteligente como pocos, jugaba de todo y por todos, decían que era un Alfredo Di Stèfano moderno, inteligente y muy capaz. Otro grande de verdad.
Y la vida me dio la posibilidad de jugar con Diego Armando Maradona en Argentinos Juniors cuando él recién era campeón del mundo juvenil, y fue otro placer verlo crecer, verlo hacer magia en una cancha, con gran personalidad y con un talento increíble.
Cada uno de ellos fueron en su momento los mejores del mundo.
¿Qué tiene Argentina para que hayan podido salir jugadores como Pedernera, Di Stéfano, Kempes, Maradona o Messi?
La Argentina tiene que sentirse orgullosa de haber visto nacer y correr detrás de una pelota a tantos y tantos jugadores de trascendencia mundial. Se habla de un semillero muy especial y cada uno de ellos son los responsables de abrir puertas para nuevas estrellas.
Tras dejar el fútbol activo se pasó al periodismo, sin embargo, estuvo cerca de entrenar a Las Palmas. ¿Cómo fue esa oportunidad?
Alguna vez me llamaron para ver si me orientaba a esa profesión, pero cuando decidí ser periodista no había lugar para ponerme el buzo de DT.
Este fin de semana se enfrentan sus dos exequipos en España, los canarios llegan al encuentro con un entrenador recién estrenado como Quique Setién y el Real Madrid viene de ganar al equipo revelación, el Celta ¿Cómo prevé que sea el partido entre Las Palmas y el Real Madrid?
Será especial verlos a los dos equipos en los que me tocó jugar y mucho más porque estaré en la retransmisión del partido por ESPN, pero nada más que sonrisas de verlos otra vez. Para Las Palmas será un orgullo jugar otra vez en el Santiago Bernabéu, otra vez en Primera, pero sabe que el Real Madrid es mucho más poderoso. Para mí es un partido especial, pero la realidad le da una buena ventaja al equipo blanco.
¿Para qué jugaba a fútbol?
Jugaba porque era lo que había soñado, porque fue la profesión más linda de las que pasé y jugaba por mi familia y mis amigos, ya que ellos seguramente sufrían una derrota más que yo y disfrutaban las victorias mucho más que yo. Y, además, porque no hay nada comparable como entrar a una cancha a «jugar a la pelota».
Autor
Últimas publicaciones
- Cuaderno de Bitácorafebrero 6, 2021Capítulo 14. No, no soy el Iñaki García que sale con Rosa de España
- Cuaderno de Bitácoraenero 24, 2021Capítulo 13. Un tip para convertir mejor (sí, hablemos de los colores)
- Cuaderno de Bitácoraenero 17, 2021Capítulo 12. ¿Cómo posicionarse en un nicho de alta competencia?
- Cuaderno de Bitácoraenero 10, 2021Capítulo 11. Un experimento fallido en Twitter (y un tip que sí funciona)